París está en llamas, o mejor dicho, uno de sus íconos indiscutidos: la catedral de Notre Dame quedó envuelta en un incendio este lunes ante la mirada atónita de millones de personas en todo el mundo, entre ellas el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.

El mandatario publicó un mensaje en Twitter en el que expresó que es "horrible ver el enorme incendio" y le dio un consejo a su par de Francia, Emmanuel Macron: "Quizás deberían usar aviones hidrantes para apagarlo. ¡Deben actuar rápido!", indicó iluminado.

El incendio adquirió proporciones épicas cerca de las 14 (hora argentina), cuando tanto el campanario como la ubicada en la intersección de la nave principal y la transversal se desplomaron consumidos por el fuego.

La catedral de Notre Dame recibe millones de visitantes al año, y esos turistas capturaron el dramático momento en que las llamas avanzaron sobre la estructura de madera del techo.