El 14 de noviembre, el equipo técnico del Instituto de Hidrobiología y de la Defensoría del Pueblo, junto a la Secretaría de Estado de Medio Ambiente de Tucumán (SEMA), se reunieron a fin de realizar el monitoreo permanente de la calidad de las aguas del embalse de Río Hondo.

Se determinaron los parámetros físico-químicos in situ, los cuales reflejaron valores que se mantienen dentro de las condiciones normales para la supervivencia de la biota del embalse.

Gracias a la implementación de las políticas ambientales por parte del Gobierno de la Provincia de Santiago del Estero, se sigue apostando a cuidar el embalse.

El anterior control se había realizado sobre biomonitoreo del perilago, del que participaron profesionales del Instituto de Investigación y Desarrollo Aplicado de Hidrobiología (IIDAH) y del Instituto Superior de Entomología (Insue) de la Facultad de Ciencias Naturales e Instituto Miguel Lillo. Las actividades realizadas consistieron en la recolección de muestras de organismos bioindicadores de calidad del agua, los cuales además representan un eslabón importante en la cadena trófica, ya que son la base de la alimentación de muchas especies de peces que habitan el espejo de agua y un gran complemento a los datos físicos y químicos realizados in situ y en laboratorio.

Este trabajo conjunto permitió recabar mayor cantidad de información sobre el comportamiento de la biota del embalse, de acuerdo a los cambios que ocurran en él.

Es importante saber el estado del embalse y de ahí ir fijando las acciones.