No todos tienen la suerte de ser excelentes amantes, pero así, como te mostramos aquí, puedes saber si realmente son bueno en la cama o no.

Los orgasmos liberan hormonas como las endorfinas, la dopamina y la oxitocina, que reducen el dolor y nos hacen sentir más relajados. Esto, a su vez, reduce los niveles de cortisol y calman el sistema nervioso.

El sexo es salud y eso se nota a través de una gran cantidad de beneficios, como la mejora del estado de ánimo, mejora la fertilidad, reduce el cáncer de próstata en los hombres o nos ayuda a dormir mejor. Sin embargo, ¿somos buenos en la cama? Así es como podemos saberlo.

Provocas entusiasmo en tu pareja. El entusiasmo significa que estás excitado con cada paso que das con tu pareja sexual. No solo lo aceptas porque sientes que no puedes o no debes decir que no o pedir algo diferente. Los grandes amantes se toman tiempo para asegurarse de que sus parejas se sientan genuinamente bien acerca de lo que ambos están haciendo.

Te sientes a gusto con tu cuerpo. Es fundamental tener confianza en uno mismo. Tu relación con el sexo está profundamente vinculada a tu relación con tu cuerpo. Los grandes amantes cuidan bien sus cuerpos, hacen ejercicio y cuidan su salud. Si te sientes cómodo desnudo, definitivamente ganas muchos puntos para ser bueno en la cama.

Entiendes la anatomía femenina. No, no hace falta haber estudiado una carrera para saber acerca de ello. Si duermes con mujeres, necesitas tener un conocimiento práctico de cómo funciona la anatomía femenina. Puedes identificar y localizar los labios mayores, los labios menores de la vagina y el clítoris. Y además también debes comprender que la mayoría de las mujeres no tienen orgasmo simplemente por la penetración.

Haces preguntas. En esa misma línea, ser bueno en la cama significa estar dispuesto a explorar y descubrir lo que cada pareja necesita. Le preguntas a tu pareja lo que quiere y solicitas su opinión, porque el sexo es cosa de dos y no debes ser egoísta a la hora de hacer simplemente lo que tu deseas.

Comunicación no verbal. A veces, no es necesario hablar. Simplemente están cómodos y eso se nota en una relación (ya sea amorosa o amistosa). Si bien la comunicación verbal es extremadamente importante para el buen sexo, la comunicación no verbal también es valiosa. Presta atención a cosas como su respiración, su lenguaje corporal, su nivel de contacto visual. No eres un lector de mentes, pero es importante para ti tratar de estar en sintonía con ella.

Vives el momento. El sexo no se trata de tener una erección dura como una piedra o durar horas y horas en la cama. Se trata de nuestra capacidad para estar presentes en el momento, conectados a nosotros mismos, y el uno junto al otro. Los grandes amantes saborean cada momento. Tómate tu tiempo con tu pareja y disfruta de cada paso que tomáis juntos.

No la presionas para tener un orgasmo. Una cosa es querer asegurarte de que tu pareja pase un buen rato, y otra bien distinta es insistir en que su placer tome la forma específica de un orgasmo, que a veces se torna complicado. Los hombres que son excelentes en la cama ponen mucho esfuerzo en complacer a sus parejas, pero sin crear presión para llegar al punto álgido.

Y además…tienes sentido del humor. Las buenas parejas tienen la habilidad de reírse cuando las cosas no salen del todo bien en el dormitorio. No te tomas las cosas demasiado en serio, y sabes que los momentos divertidos pueden ser tan vinculantes como los sexys.