Una jugada antideportiva y constantes agresiones verbales a las autoridades de un partido de fútbol terminó en la expulsión del futbolista amateur. En ese momento, se desató una brutal agresión hacia un árbitro.

El incidente se produjo en una cancha de fútbol ubicada en el paraje Santo Domingo, en el departamento Robles. Un árbitro de apellido Cisterna, de 19 años, residente en el barrio Islas Malvinas, de la Capital, estaba dirigiendo un encuentro que era disputado entre los clubes La Curva y River.

Mientras el encuentro de fútbol se desarrollaba con normalidad, un jugador de apellido Paz comenzó a atacar a sus rivales. Los había agredido, por lo que el juez le llamó la atención. Lejos de cesar las agresiones, Paz comenzó a insultar a Cisterna.

Ante la situación, el árbitro detuvo el partido, extrajo la tarjeta de amonestación y posteriormente, por una doble amarilla, expulsó a Paz. El futbolista aficionado se puso violento y comenzó a agredir físicamente a Cisterna. Le propinó golpes de puño y puntapiés al juez del encuentro deportivo, además de amenazarlo de muerte.

Los demás jugadores intentaron intervenir en el brutal ataque y se desató un violento incidente. El personal policial que se encontraba en el sitio tuvo que mediar en la pelea, por lo que el agresor se dio a la fuga del lugar con rumbo desconocido.

Cisterna suspendió el partido y se dirigió hasta sede de la subcomisaría de Vilmer, donde radicó la denuncia penal. Del hecho tomó intervención el fiscal de turno de la circunscripción Banda y Robles, Dr. Pablo Moya, quien ordenó que la víctima sea examinada por el médico de Sanidad Policial y la aprehensión del agresor.