Científicos alertan sobre las emisiones de dióxido de carbono que si se mantienen en el ritmo actual, hacia 2100 podría desatarse un proceso de desequilibrio que terminaría con la sexta extinción masiva.

El momento en el que se acumulará en los océanos una cantidad de carbono considerada crítica según las proyecciones científicas.

Esa magnitud romperá con el ciclo de carbono, un proceso biogeoquímico a través del cual este elemento se intercambia entre la atmósfera, la litósfera y la hidrosfera. De esa manera se regulan el clima y las condiciones generales que hacen de la Tierra un lugar habitable para el ser humano.