En la previa de la emocionante Final del Torneo de la Liga entre Estudiantes de La Plata y Vélez Sarsfield, partido a dispatarse hoy en Santiago del Estero, nos sumergimos en la historia de Daniel López, un auténtico fanático del “Pincha” que ha convertido su pasión por el fútbol en un viaje épico a través del país, recorriendo miles de kilómetros en su moto para estar presente en cada partido de su amado equipo.
Más de 4.000 Km
Conversando con Nuevo Diario, Daniel compartió los detalles de su travesía, destacando el compromiso y la devoción que lo impulsan a seguir a Estudiantes dondequiera que vaya. “Salimos así en moto siguiendo a Estudiantes de La Plata, tantos kilómetros... llevamos hechos como hincha unos 4000 más o menos en esta oportunidad en este último tiempo”, reveló Daniel, mostrando el sacrificio y la entrega que implica acompañar al equipo.
Camaradería
Su periplo lo ha llevado desde la majestuosidad de San Martín de los Andes hasta los rincones más cálidos de La Plata, pasando por diversas ciudades y filiales del club. “Visito filiales, venimos de racha, por eso estoy acá hoy”, explicó, subrayando la importancia de la comunidad de seguidores del equipo en cada lugar que visita. Pero su aventura va más allá de la pasión por el fútbol. Daniel ha establecido vínculos profundos con las filiales del club y con las comunidades que encuentra en su camino. “Muy bien, muy bien. Tenemos contacto con todas las filiales, somos más de 170. Lo que hacemos ahora es terminar de estrechar ese lazo que veníamos por WhatsApp o por teléfono, lo estamos concretando ahora de forma presencial”, compartió sobre su recibimiento en cada lugar.
A pesar de haber nacido en La Plata, Daniel ha forjado su hogar en San Martín de los Andes, donde lleva residiendo 20 años. “Soy platense, pero oriundo de La Plata. Hace 20 años me fui a vivir a San Martín de los Andes”, aclaró, desmintiendo algunos estereotipos sobre los hinchas de Estudiantes.
Su medio de transporte, una Benelli TRK 502 de 500 centímetros cúbicos, se ha convertido en su fiel compañera de viaje, llevándolo a cada estadio y rincón del país donde juega su equipo. “Voy a una velocidad tranquila, tengo que llegar sí o sí. Todos los días tengo que llegar”, aseguró.
El destino de la final lo llevó a descubrir Santiago del Estero, una ciudad que lo recibió con los brazos abiertos y que lo sorprendió gratamente. “Me encantó el lugar, está muy bonito”, expresó.
Daniel concluyó su entrevista con un mensaje para aquellos hinchas que viven lejos y dudan en acercarse al estadio. “Si le da la nafta, que venga. Es un esfuerzo, es un gasto, pero son gustos que uno se tiene que dar”, alentó, demostrando que el verdadero amor por el fútbol no tiene límites ni distancias. Con su espíritu inquebrantable y su amor por Estudiantes de La Plata, Daniel López nos recuerda que la pasión por el fútbol es un viaje sin fin, donde cada kilómetro recorrido es una nueva historia por contar y un nuevo capítulo en la aventura de seguir a nuestro equipo del alma.
