La mujer de 54 años vivió momentos de terror desde que realizó la denuncia policial en contra de su expareja, hasta que lo detuvieron ayer. Fueron cinco días en los que casi no durmió por el trauma que le provocó durante el ataque físico y psicológico, y por el miedo a que regresara a su casa.
La denuncia fue realizada el sábado 27 de febrero pasado en la Comisaría Comunitaria Nº 4. La vecina del pasaje 256 del barrio Primera Junta expuso ante los uniformados que su exconcubino se presentó alcoholizado en su casa por la mañana y sustrajo mercadería. La mujer se trasladó a la tarde a la casa del sospechoso para recuperar los artículos, pero fue atacada físicamente por el hombre de 55 años, quien es empleado público. Le propinó varios golpes de puño, la agarró de los pelos y la arrojó contra el piso. Tomó un rastrillo y le apoyó los “dientes” de la herramienta de trabajo en la garganta, tras lo cual le dijo: “Te voy a matar hija de mil p...”. El agresor no quedó conforme. Le metió la mano en la boca y comenzó a estirarle la lengua, con intenciones de arrancársela, mientras le propinaba trompadas en la cabeza. Seguidamente, le dio varios puntapiés y la golpeó con una pala, hasta que logró correr y ser auxiliada por vecinos.
La víctima indicó que no es la primera vez que sufría agresiones verbales y físicas, incluso, lo denunció anteriormente.
El hecho fue informado a la representante de la Unidad de Violencia de Género del Ministerio Público Fiscal, Dra. Norma Matach, quien solicitó la orden de detención. Los policías realizaron dos allanamientos en la casa del sospechoso, ubicada en 12 de Octubre al 600, pero no fue ubicado. Finalmente, ayer fue encontrado en la vía pública del citado complejo habitacional, alrededor de las 9.30.
El imputado de lesiones calificadas y amenazas, de apellido Medina, quedó detenido en la Comisaría Comunitaria Nº 4.
