Los tres implicados en el hurto de 900 toneladas de soja –valuadas en más de 22 millones de pesos- desde el campo La Virginia, establecimiento agrícola ubicado a 75 km de Quimilí, departamento Mariano Moreno, fueron excarcelados hace un momento por la Dra. María Pía Danielsen –jueza de Control y Garantías de la Circunscripción Capital- quien les concedió el beneficio bajo fianza real, la que una vez depositada les permitirá recuperar la libertad.
La magistrada hizo lugar a los planteos de los Dres. Diego Lindow, Jorge Navarro y Malena Bustos, abogados del ingeniero Gabriel Martín Ledesma, a quien impuso una caución real de un millón de pesos. También se resolvió favorablemente a lo peticionado por el Dr. Sergio Alejandro Crespín, quien se encuentra a cargo de la defensa de Lucas Farías, a quien le fijaron una fianza real de 500 mil pesos.
Además se concedió la excarcelación –bajo fianza real de 500 mil pesos- a Raúl Ricardo Montoya, quien fue asistido legalmente por la Dra. Josefina Abalovich.
La jueza Danielsen consideró que no existían riesgos procesales que impidieran conceder las excarcelaciones, e impuso medidas restrictivas a los imputados, como prohibición de contacto con los testigos que restan deponer en la causa, prohibición de salir de la provincia sin autorización, y les ordenó cumplir una serie de reglas de conducta.
Cabe recordar que el Ministerio Público Fiscal, representado por los Dres. Alejandra Holgado y Ariel Salazar, había solicitado que se dicte la prisión preventiva para los tres imputados, tras sostener la existencia de riesgos procesales, toda vez que resta producir varias evidencias.
El ilícito ocurrió entre el jueves 26 de noviembre del pasado año en horas la tarde y la madrugada del día siguiente. El ingeniero Ledesma, empleado de una empresa agrícola local, está sindicado de ser quien habría organizado el ingreso de unos 35 camiones al mencionado establecimiento rural, desde donde sacaron la soja. Sin embargo, tras la denuncia del encargado del campo los camiones fueron interceptados en Añatuya y Colonia Dora.
