La Subsecretaría de Cultura de la Provincia a través de la Dirección General de Patrimonio Cultural rescató el pasado lunes en la cuenca del Río Dulce a la altura de Los Miranda (departamento Río Hondo), los restos de un gliptodonte perteneciente al género Panochthus sp.
Este registro incompleto ha sido identificado por un equipo de paleontólogos conformado por Raúl Vezzosi (CONICET, UADER) Pablo Gaudioso (CONICET, IML) y Andrés Rinderknecht (MNHN), a partir de imágenes obtenidas de la ornamentación de las placas óseas que conforman la coraza. Al respecto, sostienen los investigadores que la morfología observada da cuenta de una ejemplar no registrado para la región chaco austral durante el cuaternario, de modo que por su relevancia es menester profundizar en el estudio de este singular fósil pleistocénico.
Representante extinto de la mega fauna local, se trataría de uno de los gliptodontes de mayor tamaño encontrados actualmente en nuestra provincia. La responsable del Área de Antropología y Cs. Naturales, Lic. Analía Sbattella señaló que a diferencia de los recuperados recientemente por la Dirección, (uno en Weisburd y otro en Campo Gallo), este ejemplar contaría con una masa corporal que supera la tonelada y puede alcanzar los 2,5 a 3 m. de longitud. Eran herbívoros especializados que habitaron en espacios abiertos bajo un clima frío y seco. Si bien se trata de animales de gran antigüedad (35 m.a), las características que se evidencian de este registro y la antigüedad de los sedimentos que lo contenían, podrían ubicarlo temporalmente entre el Pleistoceno final y comienzos del Holoceno (126000 - 11000AP).
Según se explicó, la aparición reciente en el lecho del río pudo ser provocada por la acción erosiva que ejerce el mismo sobre los diferentes estratos sedimentarios, particularmente en aquellos que suelen alojar restos fósiles. De modo que en esta oportunidad, producto del descenso del nivel del agua, quedó al descubierto este antiguo acorazado y han sido los vecinos: Franco Salas, Ezequiel Melian, Adrián Matiello, Exequiel Aragon y Antonio Sandoval, quienes dieron aviso y colaboraron en el rescate, junto al personal técnico de la Dirección y a Adolfo E. Mussi, instructor y presidente de la Escuela de Canotaje "Palas Santiagueñas", quien pudo coordinar y prestar equipamiento adecuado para facilitar su extracción del río. Una vez finalizado el rescate, los restos han sido depositados en las dependencias de la Dirección General de Patrimonio Cultural, con el objeto de ser resguardados para la realización de estudios, enmarcados dentro del proyecto de investigación que lleva adelante el equipo de profesionales arriba mencionado, sobre la Paleontología del Neógeno de Santiago del Estero.
Por último, es dable señalar que la recurrencia de hallazgos paleontológicos en los últimos tiempos, evidencia la enorme riqueza patrimonial natural que posee Santiago del Estero. En este sentido, si bien estos bienes se encuentran protegidos legalmente, se requiere del compromiso de la comunidad como ha ocurrido en este caso, dando aviso a la Dirección General de Patrimonio Cultural ante la presencia de restos, para evitar la destrucción o el expolio de los mismos.
