Otra vez y van… Pilar Durán (33 años) volvió a protagonizar un accidente de tránsito, lo que generó una vez más la intervención policial y judicial porque, además, estaba impedida de conducir por un año y ocho meses, una de las restricciones que le impusieron durante la condena del 30 de septiembre pasado.
El nuevo siniestro sucedió alrededor de las 17.40 de ayer. De acuerdo con las primeras investigaciones policiales, Durán conducía un automóvil Fiat Argo gris por calle Urquiza. Al encontrarse entre 24 de Septiembre e Independencia, por causas desconocidas, perdió el control del rodado y chocó contra un poste del alumbrado público, ubicado a la altura de Urquiza 161. Los voceros señalaron que la conductora descendió del auto y emprendió la fuga; al parecer, teniendo en cuenta que estaba imposibilitada de manejar cualquier tipo de vehículo por orden judicial.
Sin embargo, la sospechosa fue interceptada en Garibaldi y San Juan y trasladada a la sede de la Comisaría Comunitaria Nº 1, donde quedó a disposición de las autoridades judiciales. Posteriormente, la Fiscal Belkis Alderete ordenó que se identificara a Durán y continúe en libertad. Asimismo, dispuso que el rodado quedara secuestrado.
Como se sabe, Pilar Durán —quien reside en el barrio Mosconi— fue condenada, luego de que se unificaran dos causas en su contra.
El primer hecho lo protagonizó el 22 de julio último, en circunstancias en que la imputada, tras sufrir un accidente a bordo de su automóvil en calle Libertad, donde chocó la platabanda, insultó y amenazó al personal policial. La acusada circulaba sin barbijo, presentaba aliento etílico y no pudo justificar su permanencia en la vía pública.
El segundo caso ocurrió el 26 de septiembre. Durán circulaba de contramano por la avenida Leopoldo Lugones, fuera del horario establecido y violando las medidas adoptadas por el Decreto de Necesidad y Urgencia 297/20 del Poder Ejecutivo Nacional y subsiguientes con adherencia de nuestro Poder Ejecutivo provincial. Al ser interceptada por personal policial, la acusada se negó a brindar sus datos personales y, como la primera vez, se negó a someterse al test de alcoholemia.
No conducir y hacer tratamiento
El 30 de septiembre, Pilar Durán fue condenada a un año y ocho meses de prisión en suspenso y durante ese período debía cumplir rigurosas reglas de conducta, entre ellas no conducir ningún tipo de vehículos mientras dure la pena y deberá realizar “tratamiento de rehabilitación por el consumo de sustancias tóxicas o prohibidas”. La pena se le impuso en un juicio abreviado, luego de un acuerdo entre los fiscales Alejandra Holgado y Sebastián Robles, y la defensa de la mujer.
