Los equipos de salud de cada uno de los hospitales de Santiago del Estero, no dejan de librar la batalla diaria contra el avance del Covid-19. Al cuidado de cada uno de los pacientes, los profesionales sanitarios, ponen su mayor esfuerzo para salvar las vidas de los santiagueños. Pero en ese esfuerzo y demostración de humanidad, pueden sucederse hechos muy dolorosos, que ponen de manifiesto lo complejo de la situación. La muerte del Dr. Hugo Enrique Brandán, es uno de estos tristes acontecimientos, que resulta del tremendo trabajo que llevan adelante, los médicos santiagueños.
El Dr. Hugo Brandán, falleció en el mediodía del día miércoles 25 de noviembre, luego de sufrir un agravamiento de su cuadro por Covid-19. El profesional no pudo resistir la enfermedad y tras varios días de lucha, su cuerpo dijo basta.
Médico clínico, especialista en el tratamiento del dolor y en oncología, de una extensa trayectoria en los centros de salud de nuestra provincia, el Dr. Hugo Brandán se desempeñaba en la sala 5 del Hospital Independencia, donde cubría la guardia de los días domingos para brindar su atención a los pacientes que ingresaban como caso sospechoso de Covid-19.
Los trabajadores del hospital son testigos de la entrega del Dr. Brandán y así lo relatan: “Todos los domingos llegaba a su guardia y tomaba conocimiento del estado de los pacientes que quedarían a su cargo, y durante toda la jornada velaba celoso por el cuidado de los mismos. Nos dejó a sus 55 años, tras una dura lucha con el mismo virus contra el que trabajaba. Sus compañeros de guardia, hoy no pueden creer lo duro de su partida. Lleno de vida, dueño de un humor muy serio y de un respeto y compañerismo digno de elogiar”, explicó a Nuevo Diario, Walter Jiménez, supervisor del equipo de enfermería.
“El golpe ha sido duro, todo el hospital Independencia llora la partida de este guerrero, uno más que sube al firmamento de los héroes, que será recordado por siempre por su entrega y compromiso. La sociedad entera agradece al Dr. Brandán por su lucha, y pide a Dios por el descanso de su alma y el consuelo del dolor de su familia y de todos los que sentimos esta dura perdida”, es el mensaje unificado de todo el personal que trabajó codo a codo con el Dr. Brandán.
Las muestras de dolor, son directamente proporcional, al cariño y el respeto que el Dr. Brandán supo sembrar en su paso por el hospital Independencia. Las palabras cargadas de sentimientos y recuerdos, no hacen más que evocar y realzar la figura de este profesional que dejó la vida por su profesión. Literalmente, sin eufemismos.
“Dolorosa es la pérdida, mucho más la ausencia. Querido colega, sentiremos tu presencia en cada pase de guardia, en cada recuerdo que evoquemos de esta pandemia. Sabíamos de tu lucha constante por superarte, por honrar a tu familia y a tus padres con el ejercicio de tu profesión. No nos permitimos despedirte, porque te sentimos presente. ¡Un abrazo compañero!”, fueron las palabras de la Dra. Andrea Dorado, directora del hospital Independencia.
El jefe de Guardia Central, Dr. Mario Juárez, amigo personal del Dr. Brandán, resumió en pocas palabras la grandeza y humanidad de su entrañable amigo: “Fue un luchador que vino de una familia humilde y trabajadora, que se propuso ser médico para ayudar a los demás y llenar de orgullo a sus padres”, expresó visiblemente emocionado.
"Querido amigo, Dios quiso que estés antes junto a tu mami, por aquí la barra te va a extrañar tremendamente. Fuiste: compañero, médico, consejero, ocurrente y por sobre todo, amigo. Quedaron ilusiones y proyectos que en otro espacio y tiempo serán posibles. Dios te reciba” fue el mensaje de Guillermo Petatazzi, amigo personal que describió en sus palabras, la persona humilde y de gran corazón que fue el Dr. Hugo Brandán.
“Quienes tuvimos la oportunidad de conocerlo, trabajar para él y sus pacientes, lo despedimos con profundo pesar. Que Dios le dé el descanso eterno y brille para él, la luz que no tiene fin”, pronunciaron desde la administración, cuerpo médico y personal de la clínica Mayo de Añatuya.
La solidaridad y calidad humana del Dr. Brandán fue resaltada en cada uno de los mensajes que se manifestaron por su muerte. Para ejemplificar esto, María José Cruz, enfermera del hospital, recuerda la vez que la asistió en un accidente: “Fue una excelente persona y colega, buen compañero. Un recuerdo que tenemos fue cuando él nos socorrió en la ruta, cuando tuvimos un inconveniente con el Dr. Eduardo Habra camino a Añatuya, y él nos dio una gran mano”. Y agregó: “En los consultorios de Añatuya y Frías muchas personas lo van a extrañar”.
El consuelo es difícil de encontrar para cada una de las personas, que en vida estuvo cercana al Dr. Hugo Brandán. Aunque las palabras no logren dimensionar, la profundidad de la pérdida, los mensajes abrazan y evocan su memoria. El mensaje de su gran amigo Juan Arce, sirve para expresar muchos de los sentimientos, que el Dr. Brandán supo generar en vida: “Me pidieron que escriba sobre Hugo. La vida nos cruzó hace 37 años, pero nos unió a fines del año pasado, teníamos dolores de la vida muy parecidos. Hicimos muchos kilómetros juntos, reímos y lloramos juntos. Con diferencias, obvio, pero siempre en cada momento para un consejo o solamente en silencio. Hugo se fue, pero no de mi corazón. En este momento estoy aislado, no lo puedo despedir como se merece, pero sé que va a descansar en paz. Hizo mucho como médico, pero estoy seguro que muchos no tienen idea lo que hizo como persona, con sus defectos, como todos, pero siempre pensando en el prójimo. Hasta algún día Hugo, te quiero. Yiyo”.
La vida está hecha de dolores y alegrías, e incluso los recuerdos de aquellos que dejan este mundo, serán teñidos de tristezas y alegrías. Eso es lo que generan las grandes personas, los espíritus solidarios y de entrega total hacia el que está al lado. “Nadie nos prometió un jardín de rosas. Hablamos del peligro de estar vivos”.
¡Hasta siempre, doctor Hugo Enrique Brandán!
