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Deportes #Entrevista

Omar Alfredo Orellano, un goleador querido por todos

Nacido en Bandera, el ???Suri??? jugó en clubes importantes de Santiago y del interior del país. Brilló en Central, Comercio y Unión.

Si hablamos de delanteros de jerarquía y que fue importante a donde jugó, debemos mencionar a Omar Alfredo Orellano (52). Nacido en la ciudad de Bandera, el “Suri” fue considerado uno de los mejores atacantes de la década del ‘90, rindió, marcó muchos goles y fue campeón en todos lados. En Santiago, jugó en Central Córdoba, Comercio y Unión Santiago, logró cosas importantes y por eso los hinchas de cada equipo, lo recuerdan con mucho cariño. Radicado en la provincia de Salta desde hace 12 años y en donde actualmente es entrenador del club Boroquímica de Campo Quijano, repasó su extensa y rica trayectoria futbolística, que además de jugar en nuestra provincia, estuvo ligado a San Martín de Tucumán, Central Norte de Salta, Gimnasia de Jujuy, entre otros.

 

 

Un crack en el recuerdo.

 

 

—¿Dónde fueron tus inicios en el fútbol?

—Mis inicios en el fútbol fueron cuando tenía 12 años en La Plata y en Unión y Juventud (ambos de Bandera). Así comenzó mi carrera y después tuve el honor de jugar en diferentes equipos.

 

 

—¿En cuántos clubes jugaste?

—Jugué en varios clubes como Comercio, Central Córdoba, Unión Santiago, San Martín de Tucumán, Central Norte de Salta, Juventud de Pergamino, Estudiantes de Río Cuarto y Gimnasia y Esgrima de Jujuy.

 

 

—¿Qué es lo que más extrañas de tu etapa como futbolista?

—Al estar ligado como entrenador, uno sigue metido de lleno en el fútbol y eso hace que uno no extrañe tanto. Aunque la adrenalina es diferente a la de ser jugador, uno lo vive igual detrás de la línea de cal.

 

 

—¿En qué equipo pasaste tus mejores momentos?

—En todos los equipos que jugué, pasé momentos excelentes.

 

 

—¿Cuál es la anécdota que más te quedó?

—Hay muchas, pero me llena de orgullo haber conocido a “Violín” Gerez, exjugador de Unión, quien me encaminó como persona. Fue un gran ser humano. Hace poco se nos fue el papá de mi gran amigo y excompañero, Roger “Pino” Gerez.

 

 

—¿Si tienes que elegir al mejor entrenador de tu carrera, ¿quién sería?...

—Me quedo con José “Tato” Medina, de quien aprendí muchísimo. Un gran trabajador. Todo ello dio sus frutos y logramos ascender con Unión Santiago al Argentino A.

 

 

—¿Un compañero?

—Uno no voy a elegir, me llevo muy bien con la mayoría de mis excompañeros y hasta el día de hoy, sigo en contacto con varios de ellos.

—¿Tu mejor partido y gol?

—Tuve la suerte de convertir muchos goles, pero recuerdo uno que le marqué a Ñuñorco jugando para Central Córdoba. Mis goles eran todos muy buenos (risas).

 

 

—¿Qué puedes decirme de tus etapas en Central y Unión Santiago?

—Mi paso en los dos clubes fueron increíbles, me quedó el recuerdo de haber jugado en esas dos grandes instituciones, además de haber logrado ascender en los dos al Argentino A. En Unión nos dirigía “Tato” Medina y en Central, Alcides Merlo.

Hoy en día, me pone muy feliz que el “ferroviario” esté jugando en la élite del fútbol argentino.

 

 

—¿Cuántos títulos pudiste festejar y cuál es el que más recuerdas?

—Festejé muchos títulos en mi carrera, pero haber salido campeón con Comercio Central Unidos después de muchos años todavía me emociona (2000). Teníamos un grupo excelente, fuimos campeones y jugamos el Argentino B por primera vez con ese club. Después de ello, me fui a jugar como refuerzo en San Martín de Tucumán, otro gran club.

 

 

—¿El jugador que más te impresionó?

—El que más me impresionó por su calidad sin dudas fue Walter Jiménez.

 

 

—¿Cómo pasaste a ser entrenador?

—Después de jugar, mi primer club como técnico fue Unión y Juventud de Bandera. Y en ese mismo torneo, salimos campeones de la Liga Añatuyense y jugamos el viejo Torneo del Interior. Ese fue el primer equipo que dirigí. De ahí me vine a Salta para trabajar como ayudante de campo y después empecé a dirigir solo aquí en esta provincia donde estoy radicado actualmente.

 

 

—¿Te gustaría dirigir en Santiago?

—Por supuesto, me encantaría. La misma capacidad que uno tenía para jugar al fútbol, también la tengo para dirigir. Así que ojalá que algún día se presente la oportunidad.

 

 

—¿Cómo estás pasando esta larga cuarentena?

—Gracias a Dios aquí en Salta estamos más tranquilos. Hace 12 años que estoy radicado aquí y está bastante flexibilizado el tema, pero no dejo de decirles a todos que nos cuidemos, que usemos barbijos. Además hay que lavarse las manos y tomar todas las medidas de prevención.

 

 

—¿A qué te dedicas actualmente?

—Sigo ligado al deporte y estoy dirigiendo actualmente al club Boroquímica de Campo Quijano.

 

 

—¿Te quedó alguna deuda pendiente como jugador?

—Ninguna, al fútbol lo aproveché al máximo.

 

 

—¿Omar Orellano es...?

—Un exfutbolista, pero una excelente persona.

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