Un vecino que caminaba circunstancialmente por la zona sur de la ciudad Capital, en inmediaciones del río Dulce, se detuvo ante la presencia de huesos. Se acercó aún más y develó que se trataba de restos humanos. Un cráneo el signo inequívoco de que eran parte de un esqueleto de una persona. Seguidamente, llamaron por teléfono a la Policía para informar sobre el espeluznante hallazgo.
El descubrimiento sucedió ayer alrededor de la una de la tarde sobre una de las márgenes de la costanera, a la altura de la Calle 520 del barrio Los Flores.
Personal policial de la Comisaría Comunitaria Nº 54 se trasladaron hasta el lugar y corroboraron la noticia. Inmediatamente, perimetraron el sitio y solicitaron la presencia de los técnicos de la División Criminalística para que realizaran las pericias. Los uniformados determinaron que se trataba de un cráneo y de un fémur.
De acuerdo con los primeros análisis, los huesos serían de antigua data. No obstante, la representante del Ministerio Público Fiscal de Capital, Dra. Celia Inés Mussi, ordenó que los restos humanos sean trasladados a la morgue judicial del Centro Integral de Salud Banda para que sean analizados por los profesionales del Laboratorio y Estudios Antropológicos, con la finalidad de determinar de qué año datan, aproximadamente.
El trabajo del traslado fue realizado por personal de la División Bomberos de la Policía provincial y se abrió una información sumaria judicial en la Comisaría Nº 54, tendientes a establecer de cuándo datan los huesos y a quién pertenecen.
Autoridades policiales revelaron que no es la primera vez que se encuentran partes de esqueletos humanos en las márgenes del río Dulce, a la altura de la ciudad Capital. La mayoría se trata de antiguos habitantes del territorio santiagueños, aunque en otros casos —de restos más recientes— se sospecha que podría tratarse de pescadores o bañistas que desaparecieron en las aguas de milenario cauce natural y sus cuerpos nunca fueron rescatados. En este sentido, los voceros señalaron que el agua va removiendo el suelo del río y de sus “brazos”, de donde emergen sedimentos con este tipo de restos.
