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La Provincia #DomingodeRamos

Domingo de Ramos: ???Volver a conectarnos con Jesús???

El padre Mario Ramón Tenti realizó una reflexión sobre esta importante celebración

Miles de fieles católicos celebrarán hoy el Domingo de Ramos. Santiago del Estero es, sin duda, uno de los pueblos más religiosos del Norte del país y como tal, vivirá esta celebración con gran devoción, en un contexto atípico, por el aislamiento social, preventivo y obligatorio, dispuesto para la prevención del Covid-19.

Se da a este día el nombre de Domingo de Ramos, precisamente, porque Jesús fue obsequiado con sinnúmeros ramos por sus seguidores, sobre todo de condición humilde.

El padre Mario Ramón Tenti, con motivo de esta importante fecha del calendario católico, compartió para que su mensaje llegue a todos los lectores de Nuevo Diario, una reflexión sobre el Domingo de Ramos, que expresa:

 

Reflexión:

 

“Los cristianos celebramos hoy el Domingo de Ramos, recordando aquel momento de la vida de Jesús, donde va a Jerusalén para celebrar la fiesta de la Pascua e ingresa a la ciudad santa montado en un asno, mientras el pequeño grupo de seguidores, los más pobres de la sociedad de su tiempo, lo aclaman como si fuese un Rey. Es evidente que este relato tiene connotaciones que van más allá de lo histórico y que expresa la fe pascual de la Iglesia naciente que muestra a Jesús como el Rey de condición humilde, rechazado por los poderosos y aclamado por los excluidos, que ha sido exaltado por Dios.

 

 

En la Eucaristía de hoy se lee la ‘Pasión de Cristo’ según el relato de Mateo que narra lo ocurrido, luego de que la ‘aristocracia religiosa’ de Israel decidiera su muerte, desde la unción en Betania hasta su sepultura, pasando por su Pasión y Muerte en la Cruz.

El centro de esta celebración es la Pasión y Muerte de Jesús.

 

 

Es bueno recordar que, a pesar de que las interpretaciones posteriores no siempre rescaten las causas históricas de su muerte, el hecho en sí, no es algo ni exigido ni permitido por Dios. Pensar que Dios necesita la ‘sangre de su Hijo’ para perdonarnos de nuestros pecados es desconocer por completo al Dios de Jesús que es un Padre misericordioso, que quiere que sus hijos sean felices y tengan vida en abundancia.

Igualmente, creer que era necesaria su muerte para entrar en la Gloria, es decir, en comunión plena con Dios, como si se tratara de una condición o exigencia del Padre. Ambas interpretaciones vacían de sentido el comportamiento fiel de Jesús, quien pasó su vida haciendo el bien y sirviendo a los demás para cumplir, como Hijo obediente, la voluntad de Dios.

 

 

Disociar la muerte de Jesús de su vida, desconociendo las causas históricas que lo llevaron a vivir la experiencia horrenda de la Cruz, significa vaciar de sentido el anuncio de la llegada del Reino de Dios y lo que ello provoca al interior de la historia y la humanidad, condenado al cristianismo a ser una religión ‘ligth’, domesticada, sin compromiso testimonial, que de cierta manera fomenta conductas doloristas y un caricaturesco infantilismo religioso.

Para recuperar el sentido profético de la Muerte de Jesús, no tenemos otra alternativa que volver a Él, a experimentar su llamado en las ‘Galileas’ de nuestra historia, allí donde la vida urge y necesita ser sanada y salvada.

 

 

Volver a conectarnos con Jesús es el único programa válido para un cristianismo que quiere seguir anunciando buenas nuevas a un mundo cada vez más viejo y cansado”. 

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