La inclusión, como reto social, es un desafío no solo en nuestra provincia sino en muchos lugares que creen y abogan por una sociedad igualitaria y justa. La Dra. Carolina Agüero, presidenta de la Fundación La Casita del Árbol y referente a nivel local de la defensa y promoción de los derechos de las personas con discapacidad, dialogó con Nuevo Diario sobre la necesidad de pensar y proyectar una real inclusión en la sociedad.
“El modelo social en el ámbito de la discapacidad explica que las barreras, actitudes negativas y la exclusión por parte de la sociedad (voluntaria o involuntariamente), son los factores últimos que definen quién tiene una discapacidad y quién no en cada sociedad. Imaginemos a una persona que tiene movilidad reducida; su discapacidad no existiría si todas las calles y los lugares que frecuenta cumplen con la estructura necesaria para permitir su traslado”, manifestó la Dra. Agüero.
“La inclusión se presenta como la participación total de los discapacitados, en su familia, en su escuela o trabajo y en todos los ámbitos donde esa persona se va a desenvolver. Es ahí donde está la responsabilidad de la sociedad. La inclusión para mí es un niño jugando con los demás niños y no solo mirando. Es la participación total. Y en eso nos debemos hacer responsables todos como sociedad y sobre todo repensarnos culturalmente. Nosotros tenemos a nivel legislativo normativa internacional y nacional, que establece una inclusión plena. Pero la inclusión seguirá siendo una utopía si no hay un cambio cultural”, afirmó Agüero.
“Felizmente veo un cambio en la sociedad, no podemos decir que estamos igual que hace 10 años. Falta mucho, pero veo un cambio social. Se viene trabajando principalmente en lo que tiene que ver con la visibilización de la discapacidad. En Santiago del Estero, la persona con discapacidad no sale a los bares, no concurre a las escuelas, podemos decir que sigue el tabú vigente. Históricamente las personas con discapacidad han sido ocultadas y sobre eso se está trabajando para cambiar, principalmente a partir de la iniciativa de las familias y de las asociaciones. Ese es el primer paso para la inclusión, decir ‘aquí estamos’, ‘somos todos distintos pero tenemos todos los mismos derechos’. Necesitamos lograr dar un paso más adelante”, señaló la Dra. Agüero.
La presidenta de la Fundación La Casita del Árbol, además expresó un mensaje que puede iniciar el camino hacia la toma de conciencia sobre el tema: “El mensaje es que cada persona trate de ponerse en el lugar de la persona con discapacidad o de la familia de la persona con discapacidad, para que pueda pensarse en qué sentido uno se transforma en barrera para la inclusión. Se trata de tener la empatía suficiente para enaltecer la diversidad”.
“La discapacidad sufrió un gran abandono a nivel nacional”
Respecto de la situación actual de las personas con discapacidad, en torno a las políticas públicas que inciden sobre ellas, la Dra. Agüero afirmó: “La discapacidad sufrió un gran abandono en los últimos 4 años por parte del Gobierno nacional. Se necesita una reparación moral y económica. Así lo ha expresado el Dr. Claudio Espósito, quien es el nuevo director de la Agencia Nacional de Discapacidad”.
“Debemos pasar de esta situación de emergencia que atravesamos ahora, a una proyección de políticas consensuadas con las personas involucradas en la temática”, concluyó.
