Un supuesto proveedor de drogas le pidió al dueño de casa que le pagara la deuda que mantenía con él.
Ante la respuesta negativa, el proveedor se retiró y volvió horas después con medio centenar de "soldaditos" y atacó a tiros y a pedradas el frente de la casa del deudor. Viviendas vecinas también resultaron dañadas.
El ajuste de cuentas generó la intervención de autoridades policiales y judiciales.