Una adolescente de trece años vivía un calvario en su propia casa de la ciudad de Beltrán, departamento Robles. Desde que tenía nueve años era víctima de constantes abusos sexuales. El presunto depravado era su padrastro de 54 años, quien realiza tareas de limpieza en una estación de servicios.
La menor no aguantó más y decidió hablar. Le contó a su madre, quien no habría querido realizar la denuncia penal. Ante esta situación, recurrió a su hermana de 18 años, quien se domicilia en la ciudad de Fernández. La joven la acompañó y concretó la denuncia, teniendo en cuenta que su hermana es menor de edad.
A partir de ese momento, se inició una profunda investigación a cargo de la Dra. Alicia Falcione, de la Unidad de Abusos Sexuales de Banda y Robles del Ministerio Público Fiscal. La víctima fue examinada por el médico de Policía, quien constató lesiones compatibles con abuso sexual.
Tras la denuncia, la joven llevó a su hermana a vivir con ella en Fernández. Esta situación generó el enojo del padrastro, quien habría comenzado a amenazar a su pareja y madre de la menor.
Finalmente, ante un pedido de la fiscal Falcione, el juez de Control y Garantías, Dr. José Luis Torrelio, ordenó el allanamiento y detención del sospechoso. El procedimiento fue concretado por personal policial de la Comisaría 46ª. El sujeto se abstuvo de declarar ayer y está imputado de abuso sexual con acceso carnal.
Las investigaciones develaron que el detenido maltrataba a todos sus hijastros y a su pareja. En este sentido, la joven de 18 años denunciante sostuvo que ella también sufrió manoseos de su padrastro mientras vivió en la casa materna.
