El entrenador de Almagro, Carlos Mayor, admitió anoche que su equipo evitó jugar "mano a mano" con Boca Juniors en el partido de Copa Argentina que finalmente ganó por penales (3-1), porque sabía que "no llegábamos" a aguantar el ritmo que imponen los jugadores xeneizes.
"Lo planteamos de esta manera, tratando de protegernos, porque si salíamos a jugar mano a mano no llegábamos", reconoció el técnico del elenco 'tricolor', que cumple su tercer período en la institución.
Almagro consiguió eliminar a Boca en la definición por penales, luego de que los 90 minutos finalizaran igualados 1-1. El mediocampista italiano Daniele De Rossi, en su debut, abrió la cuenta para el conjunto xeneize, mientras que el atacante Juan Manuel 'Burrito' Martínez (ex Boca casualmente) estableció la igualdad en la segunda etapa.
"El empate estuvo bien. En el primer tiempo mostramos poco ritmo en lo futbolístico pero lo aguantamos bien. En el segundo nos adelantamos y lo emparejamos", contó el técnico, de 53 años.
"Tomamos mejor a (Daniele) De Rossi para que no lanzara y no salieron fácil. Tenemos gente que puede lastimar y lo hicimos, de a ratos", aseguró el entrenador.
Mayor se mostró conforme por el rendimiento de su equipo, pero puso el foco en el cotejo del domingo ante San Martín de Tucumán, que marcará el estreno en el torneo de la Primera Nacional.
"Esto nos sirve para la confianza, pero ya se terminó acá. Ahora debemos pensar en el torneo", sostuvo el DT.
De cara a ese encuentro, a jugarse en José Ingenieros, el entrenador "prenderá velas" por la recuperación del arquero Christian Limousín, quien -pese a ser figura en el elenco 'tricolor'- se retiró con una contractura en el muslo derecho.
"A los jugadores les dije que en lo físico no podíamos fallar. Había que aguantar equilibrados el primer tiempo y en el segundo, salir a arriesgar", concluyó Mayor.
