Una transexual de 42 años se presentó en sede policial y denunció que fue baleada en un intento de asalto. Tras contar lo sucedido, fue trasladada al hospital Regional, donde le practicaron curaciones. Afortunadamente, las lesiones no eran graves.
El hecho delictivo sucedió anteayer, alrededor de las cuatro de la madrugada. La víctima reveló ante los investigadores que se encontraba descansando en su domicilio del barrio 750 Viviendas, sector dúplex. En esa circunstancia se despertó por ruidos extraños y advirtió que alguien encendió una de las luces de la vivienda, donde vive sola.
Se levantó y salió de la habitación, ocasión en la que fue sorprendida por un delincuente que empuñaba un revólver. El sujeto le exigió que entregara dinero y sus pertenencias de valor, según denunció. El delincuente tomó una mochila, pero la trans no quería que se llevara sus bienes. En medio del forcejeo, el malviviente realizó un disparo y baleó a la víctima en la pantorrilla izquierda. El sujeto se alejó hasta el balcón, desde donde le realizó un segundo disparo. La bala rozó el abdomen de la trans. Finalmente, se dio a la fuga en una motocicleta.
La víctima indicó que, tras la huida del asaltante, advirtió la presencia en la casa de un casco y una campera que pertenecerían al malviviente y que se habría olvidado en la fuga.
La transexual se encerró en su casa por temor a que regresara y no salió por varias horas. De esta manera explicó por qué dejó pasar tanto tiempo en llegarse a la dependencia policial, llamar por teléfono o solicitar auxilio a sus vecinos.
Los uniformados solicitaron una ambulancia del Sease y la herida fue trasladada al centro de salud público, donde se determinó que afortunadamente las lesiones no son graves ni afectaron partes óseas.
Fuentes ligadas con la causa indicaron que los investigadores tratan de determinar fehacientemente cómo sucedieron los hechos y si la víctima conoce a su agresor.
