Un cabo de policía debió recurrir a la Justicia para denunciar a un comisario por acoso sexual. El hecho habría se habría suscitado en una dependencia del centro de Santiago, donde ambos cumplen funciones.
Según la víctima, en varias oportunidades, el superior le insistió para que dejara practicarle sexo oral, lo que habría motivado a que el uniformado tomara distancia. Sin embargo, el hostigamiento no cesó sino que fue en incremento.
Al tomar conocimiento, el Ministerio Público Fiscal ordenó una serie de medidas en las últimas horas.