El servicio de urgencias del hospital zonal de Las Termas estaba abarrotado. Habían pasado pocos minutos de las 22 de antenoche. En esa circunstancia, arribó una joven del barrio Villa Balnearia con su hija en brazos. La médica de guardia la atendió de inmediato. La mujer dijo que su hija de dos años y cuatro meses tenía “problemas” para realizar sus necesidades fisiológicas. Sin embargo, cuando la profesional la examinó advirtió que estaba casi desnutrida y presentaba hematomas en todo el cuerpo, además de traumatismos a la altura de las orejas. La doctora cumplió con el protocolo médico y alertó a la Policía. Asimismo, ordenó la inmediata derivación al Cepsi. La paciente arribó minutos después de la hora 0 de ayer al centro de salud de la ciudad Capital, donde comprobaron que estaba sin signos vitales. Le realizaron reanimación cardiopulmonar (RCP), pero no lograron revivirla.
El fiscal de turno, Dr. Rafael Zanni, ordenó la aprehensión de los padres de la niña. La madre, identificada como Beatriz Bulacio (22 años), fue apresada en el Cepsi por el personal de la Comisaría Primera del Menor y la Mujer; mientras que el padre, Fernando Luis Córdoba, un boxeador de 22 años, fue aprehendido en Villa Balnearia por la brigada de la Departamental 6. Ambos están acusados de asesinar a golpes a su hija Tatiana Salomé Córdoba.
El funcionario judicial dispuso que el cuerpo de la menor sea sometido a una autopsia para determinar cómo y cuándo se produjeron esos hematomas y las causas del deceso. Asimismo, se realizan investigaciones en el vecindario de Villa Balnearia.
Supuestos castigos de un padre “violento”
Tras la aprehensión de los padres de la víctima, los investigadores realizaron un relevamiento entre el vecindario para conocer detalles de cómo trataban a su hija. Los policías lograron establecer que los maltratos supuestamente eran constantes, aunque nadie se atrevía a denunciar porque “no querían tener problemas” con el padre boxeador, a quien calificaron de “violento” y dispuesto a agredir a cualquiera. El llanto de la niña era escuchado por los vecinos a cualquier hora del día, producto de los presuntos castigos y la mala alimentación. Incluso, los vecinos indicaron que vieron en algunas ocasiones introducir a la menor en un tacho con agua fría durante días de bajas temperaturas.
Drogas, peleas y una niña con poco alimento
Los llantos de la menor, en varias ocasiones, era producto de la falta de alimento. En este sentido, los médicos comprobaron que la víctima se encontraba en “mal estado nutricional”. Las investigaciones policiales establecieron que, presuntamente, la menor era agredida cada vez que lloraba por la falta o escasa comida que le daban.
En este sentido, los “sabuesos” indicaron que tanto la madre como el boxeador, presuntamente, son adictos a las drogas y a bebidas alcohólicas, lo que generaba en ellos reacciones violentas entre ellos y en contra de la menor.
No obstante, aún todo es materia de análisis e investigación de las autoridades policiales y judiciales.
