Un hombre de 39 años y un adolescente de 17 se presentaron ayer a la tarde en la Comisaría 29ª de Quimilí, departamento Mariano Moreno. Habían realizado 36 kilómetros a pie y “a dedo” para denunciar que hace 15 días están trabajando en un campo sin sueldo, sin comida y en condiciones de vida deplorables. Las autoridades policiales se trasladaron hasta el predio denominado “Don Miguel”, que es propiedad de un hombre domiciliado en la localidad de San Fernando, Chaco.
Los uniformados comprobaron que se trataba de 40 trabajadores, entre ellos cuatro adolescentes, todos oriundos de las localidades chaqueñas de Villa Berthel y San Fernando, quienes desarrollaban tareas de destronque y desmonte. Los peones revelaron que casi no comen y que los pocos alimentos que consumen deben comprarlos al capataz. En el relevamiento, los efectivos comprobaron en medio de los pastizales la presencia de unas 20 viviendas improvisadas con colchones en el piso.
El hecho fue informado a la fiscal de turno de la circunscripción Capital, Dra. Natalia Saavedra, quien ordenó la aprehensión del capataz por el supuesto delito de “reducción a la servidumbre”. El sospechoso fue trasladado a la dependencia policial de Quimilí, donde fue identificado como Javier Ramón Stepmik, de 40 años y domiciliado en la localidad chaqueña de Villa Berthet, a quien todos conocen como “Chifo”.
