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Policiales El hecho se produjo en el barrio Santa Rosa de Lima

Un homicida violó una perimetral, buscó a su exconcubina y la golpeó

La mujer lo había denunciado por violencia hace pocos días. Fue apresado.

Le juró que la iba a matar. La amenazó de que si lo denunciaba iba a buscarla hasta ponerle fin a su vida. Estaba enfurecido porque ella no le hizo caso y pidió ayuda a la Justicia. Tenía prohibido acercarse a su expareja, pero nada le importó. Fue a su casa, la agredió e intentó raptarla.

De acuerdo con las investigaciones, con la promesa de que quería hablar, un sujeto de 29 años se presentó en la casa de su expareja, en el barrio Santa Rosa de Lima. Faltaban unos minutos para que el reloj marcara las cuatro de la mañana de ayer. El ama de casa es una joven de 25 años. Estaba aterrorizada en su hogar y apenas lo vio en la vereda de su vivienda alertó a la Policía de su presencia.

El calvario que vivía la jovencita se inició el martes último. La joven pareja —hasta ese momento— mantuvo un fuerte cruce de palabras. El sujeto —residente en el barrio Bosco III— pasó de las agresiones verbales a las físicas. Cansada de los golpes y amenazas que sufría, la mujer decidió radicar la denuncia. Fue ese día, que el sujeto quien cumplió una condena de 10 años de prisión por un homicidio calificado, juró que la mataría. El agresor había estado en el Penal Nº 1 de Varones, luego de que asesinara a un vecino, con quien tenía diferencias.

Tras la denuncia, el representante del Ministerio Público Fiscal dispuso que se notificara a la denunciante y a su agresor de una prohibición de acercamiento y una serie de medidas restrictivas de conductas para el sospechoso.

Ayer, el agresor violó las medidas judiciales impuestas. Se presentó en la casa de la víctima. Le pidió hablar y la agredió. Intentó llevarla hacia una zona montuosa con la promesa de que charlarían y arreglarían sus diferencias. La mujer, una vez más y conociendo la agresividad de su expareja, había alertado a la Policía sobre la situación. Cuando llegaron los uniformados, el agresor se dio a la fuga. Se produjo una persecución y logró resguardarse en el monte. Luego salió y se dirigió una vez más a la casa de la víctima. Fue en ese momento, que fue aprehendido y alojado en la sede de la Comisaría 10ª.

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