Las imágenes de los civiles afectados por desmayos, convulsiones y espuma en la boca revelaron al mundo una vez más el horror de la guerra en Siria. Activistas y personal de rescate denunciaron un ataque químico realizado anoche por el gobierno de Bashar al-Assad en las afueras de Damasco, que dejó más de 40 muertos. Otras organizaciones temen el número de víctimas supere las 150.
El supuesto ataque químico fue en la ciudad de Duma, en el área de Ghouta Oriental, donde el ejército sirio y sus aliados comenzaron en febrero pasado una ofensiva para controlar la región que estaba en manos de los rebeldes.
En un comunicado conjunto, los Cascos Blancos y la organización no gubernamental SAMS (Syrian American Medical Society) denunciaron 48 muertos y "más de 500 casos, en su mayoría de mujeres y chicos" que presentan "síntomas de una exposición a un agente químico".
Además, Cascos Blancos aseguró que familias enteras murieron en Duma asfixiadas en sus refugios. La organización publicó fotos terribles de las presuntas víctimas, algunas con espuma alrededor de la boca. La mayoría de las víctimas son mujeres y chicos.
Por su parte, el Centro de Medios de Ghouta, cercano a la oposición, aseguró por su parte que hubo 75 civiles muertos y 1000 afectados. "En torno a las 21 [del sábado] se lanzó un barril desde los helicópteros de Al-Assad que contenía "gas sarín". Por el momento, la información no pudo ser corroborada de forma independiente.
Firas al Dumi, un socorrista en Duma, habló de "escenas espantosas". "Había muchas personas sofocándose, algunas murieron inmediatamente", dijo. "Era una masacre. Había un olor muy fuerte que provocó dificultades respiratorias en los socorristas", agregó.
Fuente: La Nación.
