Este martes, el régimen chavista que gobierna Venezuela informó ser el responsable de la muerte de Óscar Pérez, el piloto que se rebeló contra el presidente Nicolás Maduro. Según informaron emdios internacionales, Pérez murió junto a otros seis agentes que estaban durante el asalto por tropas gubernamentales de una casa en la zona de El Junquito, en el oeste de Caracas, donde el grupo fue localizado.
Se pudo saber que Pérez, que estaba en la clandestinidad desde el pasado junio, fue atacado por un lanzagranadas antitanque RPG-7 ruso de la FANB, desde un helicóptero de la Policía científica venezolana. La muerte ha sido confirmada por el ministro del Interior de ese país, Néstor Reverol, quien contó que informaciones ofrecidas por dirigentes de la oposición que participan en las negociaciones con el Gobierno de Maduro permitieron localizar a Pérez en la casa del popular barrio caraqueño de El Junquito donde fue abatido. Reverol incluyó a Pérez, de 36 años, en la lista de los "siete terroristas fallecidos".
