La estadounidense Kate McClure, de 27 años, pasó un momento de desesperación luego de quedarse con el auto en medio de la ruta a altas horas de la noche y verse obligada a caminar sola hasta la estación de servicio más cercana.
Un indigente de la zona que había visto toda la situación, se acercó a la joven y le pidió que volviera a su vehículo y cerrara las puertas por su seguridad.
Sin decir nada, el hombre caminó hasta la estación de servicio y gastó sus últimos 20 dólares para llevarle un bidón de nafta a Kate.
Más tarde, la joven volvió al lugar para llevarle provisiones y ropa a su salvador, llamado Johnny, para agradecerle el gran gesto.
Ahora, la joven y su novio se están ocupando de buscarle una casa y un trabajo. Según contaron, el sueño de Johnny es vivir en Robbinsville, Nueva Jersey, y trabajar en el almacén de Amazon.
"Ya no quiere estar en la calle. Quiere ser un miembro de la sociedad que funcione y no estar sentado cerca de un quitamiedos en Filadelfia", concluyó Kate.
