Durante la madrugada de ayer un grupo de delincuentes civiles portando prendas militares y un primer teniente en situación de deserción lideraron un ataque contra la 41ª Brigada Blindada del Ejército Bolivariano, ubicada en Valencia, estado Carabobo.
El comandante del Ejército de Venezuela, Jesús Suárez Chourio, anunció formalmente el fin de “un ataque terrorista, paramilitar, mercenario”, como calificó a un intento de levantamiento armado en ese predio.
Vinculó el intento de toma de ese cuartel de Valencia, la tercera ciudad más importante de Venezuela, a los comicios del domingo pasado, boicoteados por la oposición e impulsados por el gobierno de Nicolás Maduro para elegir a los constituyentes que el sábado asumieron su cargo, en medio de una ola de rechazos internacionales.
Horas antes del acto del comandante del Ejército, el dirigente chavista Diosdado Cabello había anunciado que había habido un “ataque terrorista” contra ese cuartel.
El Mercosur desconoce al nuevo fiscal
Los fiscales y procuradores generales de los países miembros y asociados del Mercosur repudiaron la destitución “ilegal” de la fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, y afirmaron que “no reconocen la autoridad” de su reemplazante, Tarek William Saab.
Lo hicieron en una declaración conjunta divulgada un día después de que los cancilleres de los miembros plenos del bloque —la Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay— resolvieran suspender de esa condición a Venezuela por tiempo indeterminado. La “destitución ilegal” es “un claro atentado a la autonomía”, indicaron.