El nuevo DT del seleccionado argentino, Jorge Sampaoli, almorzó con el presidente Mauricio Macri y le transmitió su “preocupación por el estado del fútbol argentino” durante un encuentro realizado en la Quinta de Olivos.
El entrenador santafesino, a través de un comunicado que divulgó su equipo de comunicación, aclaró que la reunión no presume “vinculación ideológica” con el primer mandatario argentino, sino que “responde” a “una invitación desde la Presidencia”.
A su vez, el vocero presidencial Iván Pavlovsky expresó que “fue un encuentro ciento por ciento futbolero entre dos personas que aman el fútbol. Una charla muy amena en la que Sampaoli contó cómo veía a la selección y cuáles eran sus planes a futuro. Obviamente dio nombres propios, aunque eso queda reservado entre ellos”.
Macri mantuvo una charla a solas con el técnico en uno de los salones de la residencia de Olivos y más tarde comieron milanesas con papas y ensalada de rúcula, preparada por la primera dama Juliana Awada, en compañía del presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio “Chiqui” Tapia, y del vicepresidente primero de la entidad, Daniel Angelici.
Sampaoli le manifestó al titular del Poder Ejecutivo su preocupación por el estado actual del fútbol en el país luego de la intervención que tuvo la AFA con la gestión del Comité de Regularización elegido por la FIFA y la Conmebol.
El comunicado del técnico abundó en que el DT se mostró “abierto a mejorar” el deporte nacional.
Sampaoli buscó mediante ese mensaje desmarcarse del presidente en términos ideológicos debido a su origen peronista y a su simpatía por el kirchnerismo, que expresó cuando entrenaba a la selección de Chile.
Pese a esa distancia política, Macri se hizo adepto a la metodología de trabajo de Sampaoli, al punto de ser partidario de que fuera a Boca Juniors, dada su condición de ex presidente del club, cuando Rodolfo Arruabarrena dejó la dirección técnica del “xeneize” en el primer trimestre del año pasado.
El ofrecimiento se lo realizó Angelici, titular de la entidad “xeneize”, pero Sampaoli declinó la propuesta porque, más allá de ser un confeso hincha de River, estaba interesado en dar un salto en su carrera hacia Europa.
