Un ex empleado entró a los tiros en la empresa de la que había sido despedido en abril pasado en la ciudad estadounidense de Orlando, mató a cinco de sus ex compañeros y luego se suicidó, informó ayer el alguacil del condado de Orange, Jerry Demings. El funcionario afirmó además que, “siete de las personas que estaban en el mismo edificio sobrevivieron al ataque”, citado por la agencia EFE.
El autor de los disparos, un antiguo empleado de la firma Gerber, especializada en trabajos de carrocería y reparación de automóviles, se quitó la vida y según el alguacil “no hay indicio alguno de que perteneciera a alguna organización terrorista”.
Demings precisó además que una de las personas a las que disparó “fue hallada todavía con vida y llevada por vía aérea a un hospital”, pero que “murió poco tiempo después”. Asimismo, el alguacil detalló que sólo una de las víctimas era mujer. El ataque ocurrió cerca de la sede de la universidad privada Full Sail University, por lo que toda el área fue aislada a pesar de que la Policía afirmó que la situación estaba “contenida y estable”.