Tal como se había programado, en el marco de la causa que investiga el brutal asesinato de la empresaria Estela López de Auad, ayer tuvieron lugar las pericias en el automóvil del policía Pablo Carrasco, un amigo de Nahuel Auad, encargado de custodiar la vivienda cuando sus dueños se ausentaban.
Las pericias en el automóvil Fiat Regatta del efectivo fueron supervisadas por la jueza de Transición, Rosa Falco de Raineri y la fiscal Olga Gay de Castellanos, y contaron con la presencia de los querellantes Ricardo Auad y Hugo Frola.
Todos se constituyeron en el predio de la ex Fandet, donde los peritos de la División Criminalística buscaron material orgánico a fin de extraerlo como muestra para ser analizado y determinar patrón genético.
Eso posteriormente sería cotejado con el ADN de la víctima, según indicaron las fuentes.
La semana próxima se desarrollarán importantes medidas procesales, entre ellas las testimoniales de Claudia Tallantes y de otras personas.
