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Motochorros asesinaron a un policía en Tucumán

El agente David Aragón (36) murió esta mañana tras ser baleado anoche.

Un agente de la policía de Tucumán fue asesinado de un tiro en la nuca por “motochorros” que lo asaltaron e intentaron robarle la moto en la que circulaba en la ciudad de San Miguel.

 

El agente David Aragón (36) murió esta mañana tras ser baleado anoche en la intersección de las calles Jujuy y Magallanes de la capital provincial, por cuatro delincuentes que se desplazaban en dos motos, quisieron robarle la suya.

 

Según testigos, Aragón se resistió al robo y al identificarse como policía se inició un tiroteo con los asaltantes, en medio del cual recibió un disparo en la nuca que le produjo pérdida de masa encefálica, por lo cual fue trasladado en grave estado al Hospital Padilla, donde murió esta mañana, añadieron las fuentes.

 

Minutos después de asalto, un joven de 29 años se presentó en la guardia del mismo centro asistencial con una herida en el brazo izquierdo provocada por un disparo.

 

 

Leé también: Condenado a 4 meses de prisión por robarse una caja de conitos en un kiosko

El herido, identificado como Juan Carlos Díaz Vidal, declaró que fue alcanzado por una bala perdida cuando caminaba a pocos metros del lugar del robo.

 

Sin embargo, los investigadores sospechan que se trata de uno de los asaltantes que fue herido por Aragón en medio del tiroteo y por eso fue aprehendido y puesto a disposición de la Justicia.

 

El ataque al policía ocurrió horas después de que las autoridades del gobierno tucumano ratificaran la decisión de enviar a la Legislatura un proyecto para prohibir la circulación de dos personas en una misma moto, en busca de reducir los niveles de asaltos de "motochorros".

 

"Necesitamos herramientas para bajar estos ilícitos", manifestó el secretario de Seguridad de la provincia, Paul Hofer, quien consideró que la moto, como medio de movilidad, se transformó en facilitadora del delito".

 

Hofer, al defender el proyecto, recordó que "hace poco tiempo los arrebatos se producían cerca de las zonas rojas, pero ahora hay personas que a bordo de un rodado están recorriendo la ciudad en busca de una oportunidad para cometer un ilícito”.

 

El agente asesinado era padre de cinco hijos y trabajaba en la División patrulleros del 911 desde 2011.

 

 

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