“Me rompió el celular”, manifestó a modo de burda excusa el bestial sujeto que masacró a patadas y trompadas a su hijastra, una beba de sólo un año, en un incalificable hecho ocurrido en la localidad de Taboada el sábado pasado. Los médicos forenses que realizaron la autopsia al cadáver de la infortunada bebita le confirmaron al doctor Sebastián Robles, fiscal de turno en la Circunscripción Judicial de la Capital —a cargo de la investigación del caso— que la víctima había fallecido a causa de las múltiples lesiones internas que sufrió, compatibles de haber sido efectuadas mediante la aplicación de patadas, en tanto que también presenta lesiones realizadas por fuertes trompadas.
Según se estableció, el acusado —de 16 años— estaba mirando televisión y la madre de la niña, una joven de 18 años y oriunda de la provincia de Buenos Aires, había salido. En determinado momento la bebita hizo un movimiento y habría provocado la caída del teléfono celular del feroz sujeto, quien le aplicó la violenta golpiza.
El brutal episodio habría sido observado por los hijos de la hermana del homicida, por lo que el fiscal Robles solicitará hoy que se les efectúe Cámaras Gesell.
El acusado quedó detenido en la Departamental 8 de Policía, en tanto que la madre de la niña fue alojada en la Comisaría 2ª del Menor y la Mujer, en La Banda.
