El caso de “Chocolate”, el perro que fue despellejado vivo, rescatado y después murió conmocionó al país. El día de ayer en los Tribunales de San Francisco el único detenido por la causa afirmó que no tiene nada que ver con la causa y pidió que lo liberen.
Se trata de un peluquero, Germán Gómez de 36 años, lleva tres semanas preso y fue sometido a pericias psiquiátricas, cuyos resultados aún no están. Su abogado pidió su excarcelación bajo fianza, esperando una respuesta hoy.
Su abogado, Sergio Corón Montiel insistió que su defendido tiene “pruebas” de que el día en que el perro fue atacado (2 de enero a la tarde), él "estaba cortando el césped del patio de su departamento y nunca saltó el tapial".
"La navaja que secuestraron, no cortaba bien, jamás podría haber despellejado un animal", agregó y cuestionó que en el primer allanamiento no secuestraron los psicofármacos que Gómez tenía "en el mismo lugar del que sí los tomaron en el segundo allanamiento, eso es algo raro también".
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Además del peluquero, declaró su madre, Delia Gómez, y hoy lo harán cuatro testigos más que aportarán que el imputado "no pudo haber ingresado al inmueble lindante a su casa y atacado" a Chocolate.
La justicia espera el resultado de las pericias psicológicas y de las pruebas de luminol -sustancia utilizada por la policía para detectar vestigios de sangre- que se realizaron en el departamento del imputado, en calle Antártida Argentina al 600, en barrio La Milka, informa el portal de La Nación.
Gómez está acusado por el supuesto delito de violación de domicilio e infractor a la ley 14.346 (Ley Sarmiento), que establece una pena de un mínimo de 15 días a un año de cárcel.
"Chocolate", un cachorro de tres meses, fue despellejado vivo y, luego de una agonía de una semana, murió. El caso generó marchas en todo el país.
