A través de un decreto que verá la luz en los próximos días, el Gobierno anunciará la transferencia de 25 mil millones de pesos a la provincia de Buenos Aires.
Dichos fondos saldrán del Tesoro Nacional, y su objetivo es compensar el congelamiento del Fondo del Conurbano, temática por la cual la gobernadora María Eugenia Vidal reclamó ante la Corte Suprema de Justicia.
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La mandataria de Buenos Aires podrá cubrir las necesidades y urgencias de una provincia deficitaria con ese dinero, dejando a Cambiemos en una mejor posición para las próximas elecciones legislativas de tal territorio.
El Fondo del Conurbano surgió en 1992 como compensación por los siete puntos de coparticipación que Buenos Aires cedió en 1988, quedando compuesto por el 10% de las recaudaciones totales de Ganancias, pero en 1995 se estableció mediante ley un tope de 650 millones de pesos, cifra que nunca se actualizó.
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El reclamo de Vidal ante el máximo tribunal incluyó cinco años hacia atrás, por una cifra total estimada en $300 mil millones, unos $50 mil millones por año.
La trasferencia que recibirá la provincia se suma al presupuesto que contará para este año: 522 mil millones de pesos para los gastos y un endeudamiento por 52 mil millones de pesos que será destinado a obras de infraestructura.
