BUENOS AIRES.- El gobierno nacional mandó a revisión toda la obra pública adjudicada durante el periodo kirchnerista, al que puso bajo lupa por las sospechas de corrupción. Sin embargo, dejó una, cedida a una empresa llamada Crearurban S.A. El dueño de la empresa que ganó la licitación para la refacción de la Basílica San Francisco de Asís, ubicada en Alsina 380 de Capital Federal y valuada por 93.363.549 millones, es Ángel Calcaterra, primo del Presidente de la Nación.
Todo proceso licitatorio comenzó en 2015 y estuvo a cargo del Ministerio de Planificación Federal. Esa misma cartera seleccionó a la empresa de Calcaterra por sobre Consulper, ya que esa firma de acuerdo a la comisión evaluadora el 16 de julio pasado incumplio con ciertos requisitos exigidos.
A pesar de poner en cuestión toda la obra pública que se adjudicó entre 2003 y 2015, producto de los escándalos que involucran a Lázaro Báez y a José López el gobierno actual decidió aprobar lo actuado en todo el procedimiento que derivó en la elección de Creaurban como la empresa a cargo de la obra.
