En medio de la terrible guerra que azota Siria y los bombardeos constantes sobre poblaciones civiles, un rescatista protagonizó un momento de extrema emoción que lo hizo romper en llanto al ver que una criatura salvada de entre los escombros luego de dos horas de estar sepultada estaba viva.
"¡Está viva!" expresó el rescatista cuando subió a la ambulancia y la niña, de 30 días de vida, comenzó a llorar luego del trauma y por el dolor de sus heridas. El héroe de esta historia se llama Abu Kifah. En ese momento también se quebró y su llanto desconsolado acompañó a la pequeña que abrazaba contra su pecho.
Alepo fue descripta como "una caja gigante de muerte" donde más de 3.800 civiles murieron en el último año por los ataques del régimen de Bashar Al Assad en conjunto con Rusia contra objetivos rebeldes.
El intenso bombardeo fue sobre la localidad de Idlib y los impactos contra un edificio dejaron 11 civiles -entre ellos siete niños- muertos.
Al menos 20.000 civiles fueron heridos por los ataques aéreos rusos sobre Alepo y el personal médico no puede atender a tal cantidad de víctimas lo que aporta significativamente a la crisis humanitaria que sufre Siria.
