Thiago Soto padece una enfermedad conocida como “piel de cristal” que le provoca que su cuerpo se lastime ante el mínimo roce. Por eso no puede salir a correr o jugar al fútbol como otro chicos de ochos años y en su tiempo libre le gusta divertirse con su Tablet, su consola de Play Station y su perritos. Pero un delincuente entró a su casa de Francisco Álvarez, en la localidad bonaerense de Moreno, el miércoles 3 de agosto por la mañana cuando él estaba en la escuela y sus padres trabajando y se llevó todos sus juguetes y, lo que más lamenta, también a sus dos mascotas. Su mamá mandó a Clarín un conmovedor video en el nene pide que se las devuelvan.
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