QUILMES, BUENOS AIRES.- Julieta tenía tres años. "Una nena super sana", la describe su mamá, Mariana. El martes 5 de abril por la noche comenzó a sentirse mal, dos días después Julieta murió. Según dice la autopsia, la nena había sufrido de dengue hemorrágico.
Aunque sus síntomas fueron totalmente compatibles con un cuadro de dengue grave, los médicos de la clínica nunca la trataron por esa enfermedad. "Buscaban una bacteria", contaron Mariana y Carlos en declaraciones a C5N. Ahora, iniciaron una demanda judicial por mala praxis y exigen justicia por su hija.
"El lunes había ido al jardín y después a un cumpleaños, era un día totalmente normal. El martes a la noche tosió tres veces y llamé al médico me dijo que le de ibuprofeno y así hice. Pero al otro día se seguía sintiendo mal, asi que fuimos a la clínica", comenzó a relatar Mariana sobre la odisea que vivió con los médicos que, según ella, dejaron morir a su hija.