Fueron muchas horas de intenso trabajo de inteligencia y seguimientos de las fuerzas de seguridad nacional (Gendarmería y Policía Federal, delegación Santiago del Estero). Todo comenzó a partir de dos allanamientos claves: en la Terminal de Ómnibus y en una vivienda del barrio Siglo XXI de Capital. El fruto de esos operativos fueron dos detenidos que se dedicaban al narcomenudeo. Las fuerzas de seguridad continuaron realizando averiguaciones y así fue como terminaron descubriendo una verdadera organización criminal narco que enviaba drogas desde Tucumán hacia Santiago del Estero. Gendarmes y federales, luego de recabar la mayor cantidad de datos posibles, decidieron entrar en acción pero antes presentaron toda la documentación al fiscal federal Pedro Simón, quien solicitó al juez federal Guillermo Molinari, los correspondientes allanamientos. Un dato que surgió durante la investigación es que uno de los presos “coordinaba”, “digitaba” o “guiaba” al resto de los narcos para la comercialización de estupefacientes. Es decir, a pesar que uno de los “eslabones” importantes de la banda estaba detenido en la cárcel federal, la narco banda continuaba operando.
Secuestros y allanamiento en la cárcel
Los allanamientos fueron en departamento Leales y en San Miguel de Tucumán.
Los sabuesos secuestraron casi cinco kilos de cocaína, cuatro kilos de sustancia para estirar la droga, celulares, armas de fuego y hasta un vehículo.
Además en una de las viviendas estaban escondidos, en un doble fondo de una pared, la droga y 400 mil pesos, dinero producto de la compra y venta de estupefacientes. Entre los cuatro detenidos se encontraba el hijo del detenido en la Cárcel Federal Nº 35 de Colonia Pinto que se dedicaba a “planificar” la compra y posterior comercialización de estupefacientes. Precisamente, gendarmes y federales allanaron ayer a la siesta la cárcel federal de Colonia Pinto. Gendarmeria y Policia Federal, agradecieron a las autoridades de la cárcel federal por haberse sumado a la investigación.
