CANADÁ.- La muerte de un bebé de 18 meses causa conmoción en todo el planeta, ya que sus padres se negaron a tratarlo de forma tradicional y prefirieron darle "remedios caseros". El pequeño murió de meningitis.
El niño estuvo semanas con fiebre y problemas respiratorios, y una amiga de su madre, Collet Spehan, le indicó que tenía meningitis y, por lo tanto, debía llevarla a un doctor.
Los padres del pequeño Ezekiel prefirieron darle jarabe de arce mezclado con agua; jugo de frutas y un brebaje compuesto de ajo, jengibre y vinagre de sidra de manzana. Cuando el niño perdió el conocimiento, lo llevaron al hospital, pero cinco días después, murió.
Los progenitores de la criatura están siendo juzgados por su comportamiento negligente, aunque consideran que solo son un chivo expiatorio de "la industra farmacéutica".
