Una mamá de 21 años tuvo que experimentar el profundo dolor de perder a su beba. En ese hondo pesar, a la madre primeriza y su familia se les sumó la humillación de recibir el cuerpo de la criatura en una caja de cartón. Así, como si fuese un envoltorio para despachar en un embalaje. El aberrante hecho ocurrió en la morgue del hospital Juan Domingo Perón de Tartagal en la provincia de Salta.
Según indica el diario El Tribuno, la abuela, madre de Érica Zelaya, fue quien accionó y denunció lo ocurrido. Enfurecida por la situación en que dejaron a su nieta, contó que su hija estaba con los controles correspondientes durante el período de embarazo y en los últimos días había experimentado algunos dolores. Señaló que la joven madre había pedido que le practiquen una cesárea. Sin decirles nada, dejaron el cuerpo en el interior de la caja sobre una mesada. Frente a la poca consideración por la vida, desde la morgue del hospital nadie salió a dar alguna explicación.
“Mi hija estaba a término con el embarazo; la trajimos al hospital pero no quisieron hacerle la cesárea y la bebé nació sin vida. Según el médico, murió por bronco aspiración, nos dijeron, y nos explicaron que tragó líquido. A mi nietita la tienen en una caja de cartón en la morgue y nos dicen que tenemos que traer el cajoncito para entregarnos su cuerpito pero no podemos conseguir que nos donen uno para llevarla al cementerio y rezarle para que descanse en paz”, expresó visiblemente conmovida por la situación la abuela de la beba. La joven mamá vive con sus padres en la comunidad 9 de Julio, en la zona oeste de Tartagal.
