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Policiales Un hombre salvó su vida de milagro

???A las cinco de la tarde me iban a llevar al cementerio???

Parte de los escombros golpeó en la humanidad de Pedro Padilla, aunque las lesiones no son de gravedad. ???Me arrojé hacia un costado y salvé mi vida???, afirmó.

 Pedro Alberto Padilla (59 años) por momentos se toma de la cabeza con su mano, mira los escombros de lo que era su única habitación y sus ojos se “cristalizan” por la emoción. ¡A las cinco de la tarde ya me iban a llevar al cementerio”, asegura el hombre. Es que antenoche, su casa se derrumbó y por poco casi lo aplasta. “Alcancé a arrojarme hacia un costado”, recordó. Los escombros lo golpearon en la pierna y el brazo derechos, aunque las lesiones no fueron de gravedad.

 El siniestro sucedió alrededor de las 22.30 en un domicilio de San Martín 2.095 del barrio Libertad.

 “Estaba sentado en un sillón al costado de la casa. En ese momento escucho un ruido y veo que la casa se derrumbaba. Me arrojé a un costado, pero igual me golpearon algunos escombros”, afirmó Padilla, quien se gana la vida como pintor cuando una dolencia que padece se lo permite.

 El derrumbe provocó un estruendoso ruido que provocó alarma en el resto de su familia —hermanos y sobrinos que residen en el mismo terreno— y en el vecindario. Una vez que el polvillo se disipó se pudo determinar que toda la estructura edilicia —construida hace casi cuatro décadas— se había caído. Debajo de los escombros quedaron las pertenencias de Padilla: una cama, un ropero, un ventilador, un lavarropas, una mesita y dos sillas. Todo quedó destruido.

 “Si se hubiera derrumbado un momento antes o después, cuando me iba a acostar, a esta hora me estaban velando y a las cinco de la tarde ya me iban a llevar al cementerio”, afirmó.

 

“Debe ser que Dios aún no me quiere llevar”

 Pedro Padilla se emociona. No sólo por haber perdido todo, sino también por estar vivo. “Debe ser que Dios aún no me quiere llevar”, señaló. El hombre contó que hace 20 años, cuando regresaba de pescar del dique Los Quiroga, en la caja de una camioneta, el vehículo pisó un bache y él salió despedido. Mientras que hace una década, mientras circulaba en bicicleta, un auto lo chocó desde atrás en San Martín y Colón. “Y ahora me pasa esto y sobreviví otra vez”, señaló. “Hay que seguir adelante”, añadió. Personal de Defensa Civil estuvo en el lugar para analizar su situación.

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