Los hermanos Marcos y Alejandro Patronelli terminaron ayer primero y segundo en cuatriciclos, subiendose a lo más alto del podio en la sexta etapa del Dakar 2016, disputada en Uyuni (Bolivia) y la más larga de la competencia.
La victoria de Marcos Patronelli (Yamaha) y el segundo lugar de Alejandro (Yamaha) rememora los años dorados de esta dupla, que desde que el Dakar llegó a Sudamérica alternó triunfos y cuatro campeonatos, dos para cada uno.
La última victoria efectiva del menor de los hermanos había sido en 2014, previo a su temprano abandono por un accidente.
La tercera etapa de este Dakar, entre Las Termas de Río Hondo y Jujuy, había sido ganada por Marcos, aunque horas después la organización modificó los tiempos porque el último punto de velocidad donde el piloto había logrado el mejor tiempo había sido anulado de la hoja de ruta el día anterior.
“No me venía saliendo una, pero esta etapa me deja contento. Fue muy linda. Lo peor está por venir”, dijo en el campamento de Uyuni.
La etapa de ayer que se corrió sobre un trazado bucle Uyuni-Uyuni tuvo un total de 723 kilómetros, con una especial de 542 kilómetros, que exigió el máximo a los pilotos, muchos afectados por la altura, tierra, arena, partes veloces y otras muy lentas.
Fueron las motos y los cuatriciclos los que más sufrieron los embates del camino, con varios abandonos por caídas, entre ellos el del chileno Ignacio Casale (Yamaha), firme candidatos al título en quad, quien sufrió una rotura de la clavícula.
