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Especiales Olga Astudillo

Letras premiadas

Del concurso literario ???Raúl Dargoltz???, organizado por la Caja Complementaria de la UNSE, les hacemos entrega hoy, en esta sección, ???letras premiadas???, creaciones de una de las ganadoras del rubro poesía, categoría iniciado mayores de 60.

Para quienes gustan de la lectura, esta poeta no les resultará en absoluto desconocida, pues su temperamento, simpatía y manejo en el arte de las letras nos es muy familiar.

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Letras Crédito: Concurso literario, Raúl Dargoltz

— La conocemos desde hace mucho tiempo como profesora de literatura y en escasas oportunidades hemos tenido la posibilidad de leer sus trabajos. ¿Qué la llevó a romper una norma en su vida y participar en un concurso literario?

— Es verdad, a pocas personas muestro lo que escribo. Es algo inherente a mi persona y mis convicciones. En determinadas circunstancias hubo gente (a la que agradezco) que sin preguntarme decidió publicar algunos textos, porque los consideraron valiosos. Me presenté por una actitud lúdica, supuse que en un medio, donde hay tantos escritores, no tendría posibilidades de ser seleccionada y además por curiosidad para verificar si estaban, en lo cierto los que me hacían llegar sus palabras de estímulo .

 

— ¿Por qué esa actitud negativa  ante su obra y depender de la palabra de otros?

— En esta oportunidad fue algo que surgió en las últimas horas del concurso. Tampoco esperaba  ningún premio, pues desconocía quiénes  formaban el jurado. A pesar de haber integrado jurados en este tipo de concursos, puedo asegurar que como concursante soy una principiante.

 

— Esa tendencia a no publicar,  no difundir tiene relación con alguna inclinación hacia la muerte. Parecería que en su actitud hay una sensación de pesimismo sobre el futuro. En cuestiones de sensaciones, ¿usted desea seguir viviendo o prefiere morirse ahora?

— No le tengo miedo a la muerte, puede llegar en cualquier momento, ese es un tema que atraviesa toda la literatura, porque es inherente a los seres vivos. Sólo nos queda una mínima porción de cómo enfrentarlo. Tal vez la escritura sea una manera de construir un mundo particular.

 

— ¿Considera que las cosas se deben vivir por el lado de las sensaciones? Puede sentir la suavidad del terciopelo en su mano y una brisa marina en el rostro o lo táctil pasa inadvertido en su vida?

— No me permitiría elegir qué sentido es predominante, porque ellos construyen nuestra experiencia de vida. Disfruto tanto de la comida como de una ciudad con edificios antiguos, con parques y jardines. La buena música, el movimiento, la brisa y el sol.

 

— Ya que consiguió aunar gusto y profesión… ¿Qué entiende por literatura?

— Creo que la Literatura es el arte que se elabora con palabras, pero no cualquier texto elaborado con palabras es Literatura. Me gusta repetir el concepto del crítico y escritor Vladimir Nabokov: “Para entender la Literatura solamente hay  que leer diez libros de los grandes maestros”. Primero hay que formarse como lector y luego surge la necesidad de la escritura. Es mi opinión.

 

— A usted, ¿qué libros le dejaron una huella inolvidable para volverlos a leer? Cuando lee a un autor famoso ¿se burla de él?

— Autor famoso no implica que sea un buen escritor. Si hablamos de Literatura como muchas personas, tengo mi lista de los diez mejores cuentos y las diez mejores novelas preferidas, pero va cambiando según transcurre la vida.  Podría mencionar algunos escritores como Fernando del Paso,  Pessoa, Kavafis, W. Faulkner, E. Heminway, James Joyce, R. Walsh, A. Machado y algunos más por qué no Salinger, V. Woolf, LStrachey H. Michaux. Los respeto mucho, los admiro más, me entusiasma hablar de ellos. ¿Si me burlo? No. Jamás. Porque su esfuerzo, si es un maestro en su arte, me produce placer, me divierte, me río, me emociona, lo envidio hasta decir ¡¡¡cómo fue capaz de escribir esto!!! Expresan  con tanta belleza lo que yo también siento o me hacen sentir lo bello.

 

SINFÓNICAS I

 

Una nota grave estalla

se multiplica en infinitos

sonidos agudos.

 

La melodía traviesa

acompaña el movimiento

de las olas,

el trino de los pájaros

el oleaje del mar.

 

El golpe del agua

contra las rocas, intenso

y rítmico balanceo

del inquieto océano.

Lenta la oscura noche no calma.

Feroz cada vez más  

fuerte el ruido

de la marea contra las piedras

sufrientes de exceso

de mar embravecido.

A lo lejos graznidos iracundos.

 

Pájaros insomnes

lastiman sus alas contra las aristas,

de muros brillantes

en esta noche

de angustia.

 

El barco navega

con ritmo parejo

hacia el mar abierto.

A babor y estribor

se mece sosegado.

Después más intenso

el embate

sacude la nave al compás

del contrapunto sonoro.

 

Adentro solo.

El silencio tenso.

El navegante atisba

luces sobre la proa

cual estrellas lejanas.

 

Semejante al barco

navega el hombre

en movimiento incesante.

Ansía como la nave

acompañar los acordes

del mar.

 

Soslaya el choque

contra las rocas del vivir,

adapta tus acordes

como los vientos

al mar.

 

Sin desafinar

únete acompasado

a este mundo,

le susurran

los sonidos marinos

en esta noche

sin sueños.

 

SERPENS

 

 Oculta su intención

en el hiératico gesto

como la imagen de Quetzacoal,

la boca abierta

la cabeza erguida

el cuerpo en reposo

alerta los ojos de aguda fiereza

en el silencio de la selva.

 

La víctima inquieta

mueve su cabeza nerviosa

cada una busca su alimento

y su destino acecha.

 

La serpiente atenta se prepara,

levanta la cola y como un latigazo

su cuerpo se arrastra y frena

se retuerce, ávida abre la boca

con fuerza hunde los colmillos

sobre el cuello de su presa.

Luego serena

adopta la escultórica postura

del dios que emerge

en la pétrea pared

de la milenaria pirámide.

 

 

 

 

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