El Gobierno anunció la decisión de reducir los impuestos internos que gravan a los autos de alta gama, motos y embarcaciones, con el objetivo de aumentar la producción y facilitar las inversiones, que en el sector automotriz rondarán en los dos próximos años los 3.800 millones de dólares.
El nuevo esquema tendrá una vigencia de seis meses y su renovación estará sujeta a los resultados que se registren en la materia.
“En el caso de los autos la tasa pasará al 10% en los vehículos que superen los 350.000 pesos (de precio), y al 20% en los de más de $ 800.000”, anunció el ministro de Producción, Francisco Cabrera. Hasta el momento, el impuesto interno era del 30% para los coches de gama media, y del 50% para los considerados “de lujo” ya sean importados o nacionales.
Además, en el caso de las motos, el 99% de la producción nacional no pagará impuestos internos ya que solo tributarán un 10% las que superen los 65.000 pesos, y las embarcaciones, la tasa de 10% se aplicará cuando superen los 400.000 pesos, con lo que quedarán excluidas alrededor del 70% de las producidas a nivel local.
“Estamos eliminando trabas y distorsiones que limitaron la inversión con el foco en la generación de más y mejores empleos”, dijo Cabrera.
A la vez el funcionario nacional subrayó que las terminales automotrices “anticiparon inversiones por 3.800 millones de dólares hasta 2017 porque hay confianza en la capacidad del país productivo que está despertando”.