El oficio de bombero es uno de los más difíciles de cumplir. No tiene horarios y los integrantes del cuerpo arriesgan la vida en cada incendio al que deben asistir.
Esto muy bien lo sabe el jefe del cuartel de la ciudad de Frías, Walter Ahumada, quien no disfrutó de uno de los momentos más importantes en familia por cumplir con sus responsabilidades.
Según relató en diálogo con Nuevo Diario, Walter y sus dos hijos varones estaban en el egreso de su hija Melani, que culminó con éxito sus estudios secundarios. Minutos antes de bailar el vals, sonó el handy que avisaba sobre un voraz incendio en un depósito, y no dudaron ni un segundo.
El Cuerpo de Bomberos cumplió su labor, sofocó el incendio y Walter y sus hijos regresaron a la fiesta, pero ésta ya había terminado.
Por lo sucedido, pidió perdón a su hija en su cuenta de Facebook.
“Mil perdones, hija... Justo en el momento del vals recibimos la alarma del incendio, y junto a tus hermanos Esteban y Christian acudimos al llamado. Y se nos acabó la fiesta. Perdonanos. Te amo hija, esto es ser bomberos”.
