La imaginación de los delincuentes no tiene límite. Tres amigos, o “cómplices” de hechos delictivos, tenían pensado inaugurar un local comercial en donde iban a comercializar celulares robados.
En los últimos días “apuraron” la instalación del local comercial y la adquisición de los aparatos móviles. Es por eso que entre el 19 y el 29 de octubre habían cometido 19 arrebatos en diferentes puntos de ciudad Capital.
Los involucrados son Maximiliano Ibáñez (20), su sobrino Lucas Ibáñez (19) y Horacio Villalba. Este último sujeto fue el encargado de armar un local comercial para “vender”los celulares que eran sustraídos a diferentes víctimas.
La organización delictiva estaba muy bien “aceitada”. Tío y sobrino se dedicaban a robar los aparatos móvil y Villalba tenía pensado comercializarlos.
Aparentemente el “negocio” estaba listo para funcionar pero los sabuesos de la División Delitos Comunes truncaron todo.
La Policía entró en acción ayer en horas de la mañana y allanó varios domicilios en el barrio Rivadavia de la ciudad Capital. No sólo fueron detenidos las personas antes mencionadas sino también procedieron al secuestro de celulares, dinero y armas de fuego de diferentes calibres. Maximiliano y Lucas Ibáñez junto con Horacio Villalba fueron trasladados a la División Delitos Comunes donde quedaron alojados. La jueza del Crimen de 5ª Nominación, Dra. Rosa Falco, indagará a los detenidos en el transcurso de la presente semana.
Estos detenidos son considerados altamente peligrosos. Fuentes ligadas a la investigación dijeron que los integrantes de este grupo delictivo “llegaron a cometer cuatro arrebatos en un mismo día en diferentes puntos de la Capital santiagueña”. Se supo que “hubo un trabajo de inteligencia previo desde los sabuesos investigadores para poder apresar a los integrantes de esta banda.
