Añatuya, General Taboada. El padre tucumano José Melitón Chávez fue designado como nuevo obispo de la Diócesis de Añatuya y esta noticia causó enorme alegría entre los católicos añatuyenses, debido al tiempo transcurrido entre la partida de Adolfo Uriona y la designación del nuevo pastor.
La Diócesis de Añatuya estaba vacante desde el 4 de noviembre de 2014 y, según lo adelantado por el propio sacerdote, su consagración episcopal se realizaría en esta misma Diócesis y —posiblemente— se realizaría en los primeros días de diciembre.
El nuevo obispo
Se trata de un sacerdote de 58 años, perteneciente al clero de la Arquidiócesis de Tucumán y actualmente párroco de El Salvador, en la ciudad de San Miguel de Tucumán y vicario episcopal de solidaridad y asuntos sociales de la Arquidiócesis tucumana. Asimismo, se encontraba acompañando junto a otros sacerdotes la Fazenda La Esperanza, institución católica que trabaja en la recuperación de jóvenes adictos a las drogas, entre otras actividades pastorales.
Este sacerdote, además, fue compañero de seminario durante la formación de varios curas que actualmente se encuentran trabajando en la Diócesis en la que fue designado y conoce a los recientemente consagrados por su vinculación con el seminario arquidiocesano de Tucumán.
Hace pocas semanas, sin saber aún de su designación, el padre Chávez compartió una charla con jóvenes del Instituto San Alfonso de Ligorio que realizaban un campamento en la localidad de Tacanas, provincia de Tucumán, donde acudió junto a jóvenes que se recuperan de las adicciones.
Toda la Diócesis recibió con alegría la noticia
El administrador diocesano, Pbro. Hernán González Cazón, remitió ayer una breve carta comunicando la alegría que causó la designación.
“Con gran alegría, comparto con ustedes que el Santo Padre Francisco ha designado como obispo de nuestra Diócesis a Mons. José Melitón Chávez. Se trata de un sacerdote perteneciente al clero de la Arquidiócesis de Tucumán, con una amplia experiencia pastoral. Muchos de los sacerdotes lo conocemos y apreciamos, por lo cual estamos muy felices de que sea el Pastor que Dios nos regala”, dijo.
“Les encarezco particularmente la oración por él para que su ministerio entre nosotros sea de una gran fecundidad. Les envío un afectuoso saludo en Cristo y María Santísima, junto con mi bendición”, concluyó su misiva.
