La maestra María Elena Moreno regresaba todos los días a su casa de la Calle 16 Nº 191 del barrio Almirante Brown por el mismo camino. Pero ayer, por esas cosas de la vida, cambió el rumbo y eligió otras calles a partir de su salida de la escuela Blas Parera, donde enseña.
Minutos antes de las 13, la docente caminaba por el tercer pasaje, entre las calles 15 y 16 del citado complejo habitacional. Llevaba en una de las manos un saco y en la otra, el maletín con una tablet, un pendrive y gran cantidad de útiles escolares que utiliza para cumplir su destacada labor como educadora, entre otras pertenencias.
En esa circunstancia, la mujer vio que dos sujetos se movilizaban en sentido contrario en una motocicleta. “No vi nada anormal”, afirmó la docente a Nuevo Diario. “Pero al pasar, la moto se detuvo y uno de los chicos descendió”, añadió. “Casi inmediatamente me apuntó al cuerpo con un revolver y me dijo: ‘Dame el bolso’. Yo le dije sorprendida: ‘Estás loco’. Pero inmediatamente me apuntó con el arma en la cabeza”, recordó. “Dame el bolso o te vuelo la cabeza”, insistió el delincuente con ojos desorbitados.
El malviviente agarró parte del maletín escolar, pero la docente se rehusó a entregarle. Finalmente, el sujeto hizo valer su fuerza física y se apoderó de los bienes. Ascendió a la moto que era conducida por su cómplice y emprendieron la huida.
La víctima fue auxiliada por vecinos, quienes se comunicaron con la Policía. Personal de la Comisaría Séptima y de los Departamentos de Seguridad Ciudadana Nº 3 Zona Sur y Nº 16 implementó un operativo cerrojo.
Cuando los malvivientes estaban huyendo, la cadena de la motocicleta se cortó, por lo que prosiguieron la fuga caminando, al costado del rodado. Cuando se encontraban sobre calle Martín Herrera casi Calle 12, los sospechosos advirtieron la presencia policial, arrojaron el vehículo y emprendieron la huida a la carrera.
Uno de los malvivientes continuó la fuga por Calle 12 hacia el este, aunque a las pocas cuadras fue detenido por la Policía, que recuperó los bienes sustraídos. Fue identificado como Cristian Sebastián Gallo, quien reside en el barrio Juan Díaz de Solís.
El otro había ingresado al fondo de una casa de las calles 12 y Martín Herrera, donde se ocultó. La presencia de un perro guardián obligó al sujeto a abandonar el escondite y salir de la propiedad, tras lo cual se dio a la fuga, aprovechando que la Policía se había concentrado en el delincuente que corría por Calle 12.
De acuerdo con las pericias realizadas a la motocicleta Zanella ZB, de 110 centímetros cúbicos, de los delincuentes, personal de la División Criminalística determinó tiene pedido de secuestro por robo en jurisdicción de la Comisaría 11ª.
“Creí que me iba a matar y pensé en mi familia”, dijo la “seño”
A pocos minutos de haber sufrido el violento asalto, la “señorita” María Elena aún se encontraba nerviosa por la traumática situación que había vivido.
“Cuando me apuntó en la cabeza, creí que me iba a matar y pensé en mi familia”, afirmó Moreno conmovida por el hecho delictivo, ocurrido en cercanías de su domicilio.
“‘Es la primera vez que me pasa un hecho de esta naturaleza”, afirmó.
La docente radicó la denuncia correspondiente y le entregaron todos los bienes que le habían robado.
El juez del Crimen de Cuarta Nominación, Miguel Ángel Moreno, ordenó que el sospechoso aprehendido en la persecución quedara detenido y acusado del supuesto delito de robo calificado por el uso de arma. Asimismo, personal de la Comisaría Séptima realiza investigaciones para detener al segundo sujeto.
