Este lunes se confirmó que Calvella “desistió de asumir” el cargo en la Dirección de Planeamiento y Fiscalización de Centros de Documentación, debido a la repercusión negativa que desató su nombramiento.
Anteriormente, el Gobierno defendió la designación de Geraldine Calvella, simpatizante de La Libertad Avanza (LLA), con poca experiencia laboral y sin título profesional. “No es la directora general del Renaper, el cargo que ocupa Pablo Santos, es una directora de línea, común y corriente, es una dirección simple”, afirmaron en la Casa Rosada.
Hoy, anunciaron que, a causa de la negatividad que generó en la sociedad su nombramiento, joven declinó el puesto.
Además, como aún no habia asumido, no fue necesaria su renuncia oficial.
La polémica surgió cuando se supo que el Gobierno decidió nombrar de manera “provisoria” a la militante libertaria en el organismo que ejecuta la identificación y el registro de las personas físicas que nacen o residen en la Argentina.
La única experiencia laboral de Calvella serían dos meses como asesora en la Cámara de Diputados de la Nación.
La simpatía con el partido del presidente y el cargo de considerable jerarquía que le otorgaron, fueron las causas que desataron la indignación de las personas.
